 
			
Yavy vuelve con nuevo single, ‘Uy, Lo Hizo Otra Vez’ versionando a Britney Spears y actuará en Festival Relevo
Yavy es una Britney Spears pero triste. Ha reflexionado sobre aquellas relaciones en las que no hay equilibrio ni responsabilidad emocional, ese concepto que tantos reels acapara en la conocida red social tanto por los verdaderos profesionales como por los falsos gurús que se apuntan al carro de la psicoterapia.
Este nuevo single, versionando la famosa canción de la princesa del pop, es lo primero que conocemos desde que sorprendió el año pasado con su primer disco cargado de un sarcasmo atrevido que daba una bofetada con la mano abierta a una sociedad podrida y enferma de mil maneras diferentes.
Quedo con ella una semana antes de este lanzamiento, ya tuve la oportunidad de poder saludarla y ver su directo cuando estuvo en la última edición de Radar Joven junto a Restinga, con la que, por cierto volverá a coincidir en Relevo, el festival que cuenta con músicos noveles que comenzará el seis de abril.
Ha habido hueco para hablar de punk, de cómo es estar en una banda, de metas a corto plazo y de rituales compositivos , además del single de marras. La palabra diversión y el verbo divertirse abundan durante el tiempo de charla, y es que e que n el fondo, detrás de esta pequeña pesimista se esconde un alma que grita rebeldía.
Se moja en todas las preguntas que le planteé resultando una entrevista muy rica para quien redacta estas líneas. Fue un placer hablar de tú a tú con ella, aunque amenazase la lluvia.
¿Cómo y por qué decides lanzarte en solitario después de un breve tiempo en Ginebras?
Era la batería y sólo estuve con el primer EP, luego ya no nos entendíamos mucho, o sea, que no fue solamente decisión mía sino que fue un poco mutuo.
Antes de Ginebras yo ya estaba componiendo, también un poco por eso entré en esa banda, porque les enseñé las canciones, y vieron que estaba haciendo cosas de música.
Con Ginebras también seguí componiendo mis cosas y luego, básicamente, fui desarrollando el disco.
Por decirlo así, siempre pensé que quería hacer mi propia música desde antes de Ginebras, o sea, también me divertía estar en un grupo y todavía a día de hoy pienso mucho : “qué guay estar en un grupo en el que no seas tú la responsable principal del proyecto sino que también tienes una responsabilidad compartida”, pero no es lo mismo que cuando es tu proyecto en solitario.
También hago canciones muy complejas a nivel de estructura, sobre todo, no son tan fáciles de tocar y a veces digo “me gustaría estar en un grupo de punk y hacer canciones en plan verso estribillo verso estribillo con quintas ¿sabes?» y centrarme en hacer letras divertidas y graciosas, y divertirme, y tocar más fácilmente; cosas sencillas. Sí que estoy abierta a eso.
Si en algún momento alguien está montando una banda, o le apetece montar una banda que sea más de ese estilo…Yo estaría súper in. Incluso tocando otras cosas. Me apetece más tocar la guitarra porque no lo he hecho nunca en un grupo, recuperar la batería no estaría mal…Pero sobre todo la guitarra me gustaría más, sí.
¿Y compaginarlo con Yavy?
Sí, sí. Es verdad que los proyectos musicales te llevan mucho tiempo, añadido a que yo no soy tan joven, tengo trabajo y tengo que dedicarle unas horas (o sea, dedico unas horas al trabajo y luego tengo que ponerme con mi música) y al final es un trabajo también: tienes que plantear el directo, cómo cambiarlo, ensayarlo, presionar a gente para ensayar, no solamente es tu responsabilidad, hablar con tu mánager porque hace falta más directos, buscar directos tú.
Es un trabajo en el fondo, y me encantaría vivirlo solamente como una emoción, algo divertido, y sé que al final sí me gustaría tener otra cosa, pero es verdad que a nivel de tiempo no sé si podría.
Me encantaría poder tener más tiempo y tener un grupo de punk. Sería mi sueño: chillar y no preocuparme tanto por cómo estoy tocando y simplemente disfrutar en un escenario.
¿Las canciones estarían dentro de la misma línea nihilista que en Yavy?
Sí. Yo creo que es mi personalidad un poco. También, cuando escribo, igual es más emocional pero tiene mucho de sarcástico, nihilista, o sea que no solamente es la música sino es cómo soy en general como persona.
¿Cómo fue tu experiencia en Ginebras?
Al final en las bandas tienes que gestionar un grupo de gente y es muy difícil, eso es una realidad. Y me parece súper complicado, y de hecho no he sido capaz de hacerlo, ni siquiera en amistades, ¿eh?.
Yo he sido una persona siempre de ir más a mi bola, que le gusta estar con un grupo de gente, luego conocer a otro… A mí eso de comprometerme con un grupo de gente para todos los días de mi vida es algo que me parece inconcebible.
Me gustaría que me pasara, pero no me ha pasado todavía, y ahora tengo un grupo de amigos donde he hecho un esfuerzo, pero aún así soy la que se compromete aunque luego estoy a otras cosas, no estoy al 500% en general.
En los grupos hay personas que quieren estar todo el día juntas, y también que no tienen otro remedio porque si el grupo empieza a funcionar, tienen un montón de conciertos todos los fines de semana y han de estar juntos todo el rato.
Pero hay gente que se lo toma más como de libertad y otros que quieren ser amigos las 24h y eso yo no puedo, me he dado cuenta de que igual puedo trabajar para acercarme un poco a ello pero no puedo estar en ese mood.
Esto no es algo que te diga solo yo, cuando hablas con las bandas siempre hay una dificultad añadida: la de flexionarse como grupo y, encima, está aquello de ser un poco una relación de pareja y además, tienes el trabajo de por medio. Todo junto es mucho más complicado cuando sois cuatro personas, cinco personas…
Depende también del nivel en el que estés, de cómo te lo tomes… Por eso te digo que una banda con un colega de coña no es el mismo mood que cuando la banda ya se profesionaliza desde el minuto uno.
En una entrevista decías que te acercabas a lograr que tus discos sonasen a tí misma. ¿A qué te referías con eso? ¿Cuál es esa meta de sonido?
Trabajo con un productor y estamos haciendo un trabajo espectacular. Adoro lo que está saliendo, pero sí que me gustaría ser yo más la responsable del sonido que sale.
En el disco, depende de la canción, tuve bastante mano ya que había cosas que había buscado yo.
Al final, trabajar con otra persona, por mucho que yo adore trabajar con Pablo García (porque yo lo adoro, y me encanta y aprendo muchísimo), siento que a veces no llego a expresar 100% el sentimiento o la emoción que quería expresar y que igual el disco suena más, a pesar de ser bastante alternativo y naif, comercial de lo que igual a mí me habría gustado que sonara.
En realidad estoy muy contenta; pero es la sensación desde dentro, que hay sonidos tan buenos, tan perfectos, que me gustaría que no lo fuesen; pero es un debate conmigo misma… Son rayadas de artista.
Soy consciente de que cuando estás produciendo un disco siempre sientes que no está llegando a donde tú quieres (es como un pensamiento recurrente) pero en el fondo trabajar con Pablo me ha ayudado muchísimo a mostrar lo que sentía.
Es buscar un equilibrio muy complicado entre lo que tú tienes en la cabeza y lo que la otra persona tiene en la cabeza, que muchas veces no se consigue del todo, pero sí se llega a un entendimiento.
Creo que me refería a que me gustaría desarrollarme más como productora para que cuando trabaje con Pablo yo le pueda dirigir más en el camino, que me pasa ya mucho porque él tiene mucho más conocimiento del sonido que yo.
Julieta Venegas es una de tus influencias. ¿Qué hay de ella en tu sonido?
No solamente ha sido que yo abrazara esa referencia, antes de eso ya había mucha gente que me decía que cantaba como Julieta Venegas ¿no?, y después sí es verdad que la he escuchado más, he escuchado más discos suyos y la admiro un montón, y sí que creo que está un pop un poco onírico (no sé cómo explicarte) de letras un poco random que a mí me vibran bastante, y de cantautora (pero pop) y un poco señora, quizá va por ahí y es en lo que creo que se parece.
No es que yo quisiera ser Julieta Venegas, sino que se me empezó relacionando un poco, y de repente me di cuenta de que había un nexo que no había pensado antes, que sí que estaba ahí, que todavía no tengo muy claro al 100% qué es, pero sí que está.
«Sí que siento que nadie quiere ser un peñazo hablando de sus problemas.
Es algo muy español, tendemos mucho a la comedia con problemas. Se crea esta tragicomedia extraña tipo el esperpento.»
El 4 de abril sale tu próximo single, una versión de una canción de Britney Spears. Háblanos un poco de este lanzamiento.
He dicho a veces que era como una Britney Spears triste porque hubo una canción, la de ‘Te abandonaré (poco a poco)’, la primera que produje con Pablo, en donde él me decía “¿qué onda es, por dónde quieres llevarla?” y le dije: “es una Britney Spears triste” . Entonces me hizo gracia y lo compartí.
Es una versión en español de ‘Oops I did It Again’ que se llama ‘Uy, lo Hizo Otra Vez’.
Con Britney también me pasó que en el disco me negué a hacer canciones de amor (que ya sé que mucha gente piensa que lo son pero en realidad no hay ninguna canción de amor en el disco) y me cuestioné el por qué me negaba tanto a hablar de amor, reflexionaba mucho sobre esto, porque por supuesto que sí le dedico tiempo a pensar en el amor, y empecé a escuchar mucho a Britney Spears.
Me hace mucha gracia la de ‘Oops I Did It Again’ porque es, en general su mood también: soy una diva, un poco femme fatal, que rompo corazones, que creías que me importabas pero en realidad me importas una mierda, ¿no? y reflexionaba conmigo misma el cómo he tratado a veces a mis relaciones, de ahí sale hacer esta versión, de hablar de mi experiencia pero también de lo que siento que todo el mundo hace, que replica todo el rato y no tiene ningún sentido que lo repliquen porque la realidad es que todos queremos sentirnos bien y cuidarnos los unos a los otros; pero luego empezamos con estos juegos estúpidos de poder en las relaciones.
A veces esa persona no te gusta tanto pero te das cuenta de que a pesar de que no te guste tanto has creado un vínculo con ella. No puedes negar ese vínculo.

Un momento de la entrevista con Yavy
Sí, eso me recuerda a algo que leí el otro día a una psicóloga hablando de los casi algo…Que aunque tú no le pongas nombre a lo que has tenido con esa persona, has creado un vínculo y sí que ha sido “algo”.
Digo casi algo en la canción. Y yo lo llamo casi algo porque sé que no me he enamorado.
El casi algo es una forma muy peyorativa, no lo usamos, vale, pero sea lo que sea, exacto, como dices tú, has creado un vínculo y no puedes desvincularte de él; y no puedes pretender que no era nada porque luego, hasta tú mismo te das cuenta de que era algo, claro que sentías por esa persona aunque no estuvieras enamoradísima y quisieras casarte con esa persona.
«A veces esa persona no te gusta tanto pero te das cuenta de que a pesar de que no te guste tanto has creado un vínculo con ella.
No puedes negar ese vínculo.»
Estarás en el festival Relevo, un concepto diurno de conciertos. ¿Apuestas porque en el futuro se impongan los festivales de día en contraposición con los festivales de noche?
A mí me mola, hay una mezcla.
No es el primero que hago, ya estuve en uno que se hizo en La Casa Encendida, ese fue más heavy, era de día y encima con niños… Fue un experimento total para mí. Tengo familia joven pero no viven en la misma ciudad y tampoco me encantan los niños, entonces, me divertía también, me apetecía probar; pero era como “¡wow! ¿cómo voy a enfrentarme a esto?” . Fue bastante divertido.
En Relevo más que que sea por el día es que, en un ambiente de un sitio tan abierto, la gente está más de chill con su vermú y puede pasar que no te hagan ni caso; por otro lado está aquello de que la concentración en una sala muchas veces se dirige mucho más al escenario, la gente ha ido ahí para verte.
También es verdad que el alcohol puede ayudar o perjudicar. Si la gente está más alcoholizada igual de repente les interesas más (no lo sé).
Como espectadora, para mí ir a un concierto de vermuteo me encanta, me parece una fantasía.
Los de la noche son distintos y es verdad eso de que siento que me concentro más en la noche, y que en el día estoy más disfrutando del tiempo, presto atención pero es otro tipo de atención.
Sí que creo que las dos son importantes, las dos escenas. El festival Relevo va a ser guay, me impone bastante el patio del Con Duque; me parece tan mítico… De repente yo allí tocando ¡wow!. Me apetece un montón.
También voy a estrenar formato, ya no voy a ir con batería y teclado sino con teclado solamente y vamos a ver qué tal sale. Voy a hacer todo lo posible para que salga súper bien.
Me gustaría saber qué opina el público, si le mola… Habrá gente que haya visto los otros formatos y querré que me digan.
Relevo visibiliza a las futuras promesas de la música nacional. ¿Te sientes futura promesa?
Claro que sí, claro que sí. Me gustaría ser una promesa ya, no una futura promesa.
» Quiero ser yo y quiero divertirme.
Lo que salga dentro de esa diversión y de ser yo, (o lo que creo que es ser yo como proyecto) le doy alas y si mola, pues pa’ lante.»
¿ Preparas nuevo material? Si es así, ¿seguirás la línea nihilista de ‘Nada que Aportar’?
Estoy un poco en parón creativo, la verdad. Me cambié de trabajo hace poco y necesito tener mi tiempito para volver a asentarme y componer.
Aún así va a salir este tema nuevo, va a salir otro más después, y luego ya tengo que crear cosas nuevas.
Llevo bastante tiempo preguntándome si voy a seguir lo mismo o no. Yo creo que no, no va a ser exactamente igual.
En el fondo siempre he querido (no me quiero adelantar porque no sé si va a ir por ahí o no) hacer cosas menos hiper producidas, más sencillas.
Al final componer es como jugar porque lo que quiero es no limitarme, ponerme a jugar y quedarme con lo que salga de ahí que mole, evidentemente.
Al principio mi idea era quiero trabajar con este concepto, o quiero trabajar con este tipo de línea sonora pero me he dado cuenta de que no es la forma de que a mí me viene la composición; así que prefiero simplemente liberarme de cualquier tipo de barrera, y al ir jugando al final me voy dando cuenta de que hay una línea en todo; lo que pasa es que es una línea más inconsciente y más vital que una línea decidida.
Es posible que sea algo menos saturado. No me apetece hacer lo mismo pero sí va a haber líneas en común de tipo de letras… No sé, quiero ser yo y quiero divertirme.
Lo que salga dentro de esa diversión y de ser yo, (o lo que creo que es ser yo como proyecto) le doy alas y si mola pues pa’ lante.
Mola mucho más abrirte a todas las opciones y meterte donde te apetece.
Me parece mucho más fácil componer así. Cuanto menos piense que es un trabajo, mejor.
La canción que sacaré después de ésta es una muy especial. Me gusta mucho más conseguir cosas distintas e interesantes por jugar y pasármelo bien, que decidir seguir una línea que no necesariamente va a conseguir que haga lo mejor de mí misma. De momento es así.
Igual cuanto más tiempo llevas, más fácil es dirigir, o es más rentable, porque si estás dedicándote a ello profesionalmente, si tienes que hacer un álbum al año (o lo que sea), igual sí te compensa más seguir una línea.
¿Te tomas demasiado en serio y tu forma de rebajarlo es en las canciones?
Sí, creo que en general soy una persona muy pesimista, pienso que las cosas están mal, y que la vida es muy dura, y que la gente está sufriendo muchísimo. Siento eso todo el rato, pero no puedo estar diciendo eso todo el rato, así que tiro más de sarcasmo riéndome un poco de esta manera; pero bueno, sí que tiene un poco de “rebajarlo”.
Creo que lo dije en otra entrevista, sí que siento que nadie quiere ser un peñazo hablando de sus problemas. Es algo muy español, tendemos mucho a la comedia con problemas. Se crea esta tragicomedia extraña tipo el esperpento.
Entiendo mucho esta sensación y siempre voy a ser un poco negativa, aunque quiero intentar serlo un poco menos.
Siento que el primer disco fue un poco infantil o adolescente en algunas cosas y me gustaría que el siguiente fuera un poco más maduro y un poco menos pesimista dentro de un pesimismo que tiene que existir, porque también creo que a la gente le cuesta mucho hablar de estas cosas (que a mi también, pero por lo menos lo hablo).
A la hora de hacer canciones, ¿qué necesitas para crear el ambiente idóneo? Da la sensación de que tienes una parte introvertida potente desde fuera, observándote.
Es verdad, de hecho estuve hablando de esto con una amiga hoy. Al final, yo para componer necesito estar en un momento de introversión, necesito estar a mi bola, sin gente (que hay gente que le encanta componer con gente pero creo que es otro tipo de composición).
Para el tipo de proyecto que es Yavy, necesito estar tranquila, reflexiva, leyendo, dentro de mi mundo interior.
Cuando estoy en un momento muy extravertido, que también lo tengo y también me gusta ese proceso mío, no soy capaz de componer y por eso siento que ahora voy a poder empezar a componer porque sí que estoy volviendo a retraerme.
Si que espero que, aún así, este momento que se está activando en mi cabeza lleve a crear cosas nuevas.

Lorena M.
Redacción
