Con tan solo cuatro canciones, esta banda barcelonesa ha conseguido ahondar en lo profundo e irónico de una de las etapas más conflictivas del ser humano. Porque sí, a veces el amor no tiene final feliz y sintiéndolo mucho, habrá momentos que (homenajeando a una de sus letras) no volverán a suceder.

Sin diferencias entre “la vida normal” y la vida de rockero”, hacen garaje y punk sin artificios porque para filtros, ya está Instagram.

Yago (voz y guitarra), Pol (bajo) y Arnau (batería) han entrado con paso firme a nuestras casas con un trabajo que presenta solvencia, madurez y melodías que enganchan. El pasado de ‘Mujeres’ estuvo bien, el presente de ‘Mujeres’ está bien y el futuro de ‘Mujeres’ será para escuchar a todo volumen.

Hay quien dice que mejor no crear expectativas para luego no decepcionar. ¿Vosotros habéis depositado muchas en este trabajo?

Yago: ¿Quien dice esas cosas? No nos identificamos demasiado con esa actitud. Hacemos nuestra música desde la más absoluta ilusión del primer día. Este trabajo funciona como continuación de nuestra anterior LP «Un sentimiento Importante» y lo entendemos justamente como algo que es inevitablemente su resultado y también la posibilidad a probar cosas nuevas.

 Arnau: La verdad es que no hemos pensado demasiado a la hora de hacer este disco. Tampoco nos planteamos demasiado las cosas, simplemente intentamos hacer buenas canciones y que la gente las disfrute.

¿Por qué un EP y no un disco?

Yago: Es un formato maravilloso. El disco anterior fue un vaciado creativo importante, le dedicamos muchos esfuerzos y un Ep siempre supone una nueva oportunidad sin tener la presión de un disco. También es bonito que su corta duración hace que siempre parezcan discos muy redondos. O para sacar singles es maravilloso.

Arnau: Sinceramente no teníamos más canciones. La idea de grabar un Ep surgió en enero (creo), reservamos el estudio y nos juntamos un par de semanas para intentar hacer algunas canciones, tuvimos suerte y sacamos cuatro.

Se titula ‘Romance Romántico’ pero las cuatro canciones de las que se compone hablan más bien de la vida tras un romance, ¿hay experiencias propias? 

Yago: El tiempo nos ha enseñado que la vida te pone poco a poco ante pequeñas crisis y que estas al final son procesos muy importantes. Nos pareció una forma un poco menos explorada de tratar temas amorosos. Del título nos gustaba esa redundancia, que se mueve siempre en la ironía y el tono del grupo.

La Huida es la más cañera, ¿su celeridad representa lo necesaria que es a veces? 

Arnau: Hicimos un tema más rápido para que hubiese variedad en el disco, y la letra vino después.

Yago:  ¿Más de una vez hemos resuelto las cosas largándonos por patas, no?

Pol: A la hora de hacer un disco (sea Ep o LP) siempre tenemos en cuenta los directos y entendemos que debe existir cierta variedad. Sabemos que un directo necesita esos momentos de intensidad, nerviosismo y velocidad, esta canción responde un poco a esa necesidad.  En cuanto a la necesidad en la vida de, a veces, «huir», sí, es básico, ya sea largándote al campo o leyendo un libro. Huir significa alejarte de cosas conocidas y acercarte a cosas desconocidas o menos habituales en nuestro día a día. La huida puede venir dirigida por el miedo o la inseguridad pero también por un afán de descubrimiento. Aunque ahora que lo pienso, también huimos de situaciones extrañas para encontrar la seguridad del hogar. Mira, no tengo ni puta idea.

Vuestras giras no se cierran solo a la geografía española, EEUU también entra en vuestro planes. ¿Es diferente la acogida del público entre un país y otro?

Arnau: Sí, la verdad. También porque, además de (ahora) cantar en castellano, aquí hemos tocado mucho más en comparación con otros lugares. La gente aquí se sabe más las canciones y está acostumbrada a verte. Fuera eres un -casi- desconocido. Aunque en la última gira por Bélgica la acogida fue espectacular.

Yago: Es bonito salir fuera pero de un tiempo para aquí hemos centrado esfuerzos en tocar por España. Nos morimos de ganas de empezar a girar por Latinoamérica.

Pol: La verdad es que cada vez viajamos menos fuera de los límites de la península ibérica. Tenemos nuestras obligaciones por Bélgica y Francia por temas de coediciones del disco (sello de estos países nos editan ahí) pero, aparte de esto, creo que nos hemos desencantado de esa idea de rodar por el mundo. Creo que ya no estamos dispuestos a ir a sitios en los que haya que trabajarse un público nuevo desde cero. Llevamos más de 10 años con esto y si funcionamos en un sitio porque se ha hecho una buena promo y los discos funcionan, pues iremos. Si no, es probable que no vayamos a tocar para encontrarnos en una sala con 12 personas de público, a menos que sea un país maravilloso y todo sea una excusa para viajar y estar de vacaciones.

Fue tras el éxito de «Aquellos Ojos» que decidisteis utilizar definitivamente la lengua hispana pero, ¿volverán ‘Mujeres’ a sonar en inglés?

Arnau: No nos lo hemos planteado, de momento creemos que con esta nueva vida en el grupo -trío-, es más directo y redondo al cantar en castellano.

Pol: El castellano lo hemos utilizado siempre, incluso nuestra demo tenía un tema cantado en castellano. Más que por «Aquellos Ojos», el cambio a castellano vino como una especie de renovación a partir de la marcha de nuestro antiguo guitarrista. También tuvimos como una especie de revelación divina que nos hizo ver que donde estaba nuestro público y donde nos trataban mejor era aquí en España, así que parecía lógico dar ese giro definitivo. Al inglés dudo que volvamos, sería como ponerse una máscara, como disfrazarse.

Este trabajo, que coincide con vuestro décimo aniversario, ¿os hace afirmar que cualquier tiempo pasado no fue mejor?

Arnau: Bueno, nosotros pensamos que todas las épocas han estado bien, no nos gusta comparar. Aunque haya habido momentos malos en el pasado, los habrá en el futuro, así que no tendemos a mitificar para nada el pasado.

Pol: Todos los momentos de Mujeres han sido maravillosos, desde el explosivo inicio hasta la situación actual. El pasado estuvo bien, el presente está bien y el futuro espero que también. Tampoco vivimos negando de dónde venimos.

¿Cómo ha influido ‘Sonido Muchacho’ en vuestra vida (musicalmente hablando)?

Arnau: Musicalmente no ha influido. Hemos tenido la suerte de estar siempre en sellos que han apoyado totalmente nuestras canciones y nunca nos han dicho ni comentado nada. Nosotros grabamos las canciones y se las mandamos al sello. Él decide si las acepta, y a partir de ahí, adelante.

Pol: Cuando picamos a la puerta de SM, ya fuimos con el disco hecho y la idea del castellano ya estaba tomada, así que no influyó en nada, aunque fue un momento en el que el sello estaba empezando a crecer y había una energía muy positiva, de hacerlo todo muy bien y crecer, mucha ilusión. Esa ilusión, sin duda, se nos contagió y por eso estamos disfrutando tanto la gira del LP y de este nuevo EP.

Vuestro perfil de Instagram se caracteriza por sus publicaciones de humor ácido. Vuestras letras, en cambio, son más vehementes. ¿Hay diferencia entre los artistas y quienes hay detrás de los mismos? 

Pol: No creo que las letras sean vehementes, aunque supongo que te refieres a que, a veces, comunican cierta impetuosidad. En esto de las bandas siempre nos ha hecho mucha gracia esa diferencia que existe entre las personas y la imagen del grupo. Esas fotos de promo que se hace la peña, muy serios, con pose de rockeros o lo que sea, totalmente postalero. Nosotros no creemos en esta diferencia e intentamos mostrar nuestra naturalidad, romper esa idea de «vida normal» y «vida de rockero». Nuestras fotos de promo son sencillas, humildes; nuestros vídeos están rodados con un móvil y salimos nosotros haciendo el panoli o viviendo nuestras vidas, sin artificios; en nuestros directos intentamos ser cercanos y charlar con el público como si estuviéramos en un bar. Siguiendo esta lógica, nuestro Instagram refleja nuestra vida sin filtros, nuestras bromas y las cosas raras con las que nos vamos encontrando en nuestras giras. Es una forma de ser más cercanos con la gente que nos sigue y de que nos vean como un grupo de amigos que se lo están pasando bien.

Tras la llamativa portada del escorpión de vuestro antiguo trabajo, ¿qué buscáis representar con esta?

Pol: No hay mucha historia. Queríamos algo con más color, que siempre hacemos diseños duotono. Como me gusta hacer historias recortando papeles y fotocopiando y jugando con la composición, pues surgió esto. Sí que está la idea del «romance», con esa mancha roja que puede ser sangre (dolor) o un corazón (amor). Luego está esa figura que podría ser femenina que juega con la idea del ser querido, con esa sonrisa demencial que ayuda a concretar esa idea irónica que desprende la redundancia inútil del título, como ha comentado Yago antes.

¿Acabaran teniendo nuestros oídos un romance con este EP?

¡Eso esperamos! De momento la acogida está siendo muy buena y espero que dure el amor con estas canciones.

Isi Candelas

Isi Candelas

Redacción