The XX han realizado otro gran disco: «I See You» es una auténtica demostración de autenticidad, complicidad y madurez
Empezaremos diciendo directamente que “I See You” será uno de los mejores discos de este año, y eso que apenas acaba de empezar. Por lo menos eso es lo que percibimos y percibiremos cada vez que lo escuchemos porque es una obra que rebosa autenticidad y complicidad.
A primera vista se nota que el trío está muy convencido de lo que ha producido y, además, de que lo han disfrutado y lo hacen continuamente. Un trabajo bien pensado y meditado. Los cinco años que ha tardado en llegar este nuevo álbum así lo demuestran: no han dejado nada al azar y no están defraudando a nadie.
Esta vez The XX han hecho un cambio importante, han evolucionado conscientemente dentro de las necesidades actuales, quizás sin quererlo porque su alcance de popularidad puede llegar a ser enorme. Y han sido capaces de crear un sonido nuevo donde se encuentran muy cómodos y sin dejar de guardar parecido a sus antiguos trabajos. “I See You» se convierte automáticamente en una pieza que no puedes dejar de observar una y otra vez.
Se nota la mano, mucho más influenciable del Jamie XX en solitario: bases más movidas que en algunos momentos se convierten en bailables y, en otros puntos del disco, emocionantes. En sus dos anteriores largos, todo parecía mucho más cristalino y tímido, la transparencia se podía palpar, todo quedaba dentro de una burbuja. Ahora han explotado esa capa e incluso sus dos vocalistas parecen mucho más decididos. Oliver continúa en su excelsa línea de siempre pero Romy se muestra totalmente desatada y en un estado de gracia agigantado. Cada verso que recita está lleno de significado y fuerza y un ejemplo de esto es “Brave For You”. Los acordes reconocibles de los ingleses siguen estando presentes pero de forma mucho más secundaria. Una mezcla y variedad que nos muestran a una banda mucho más optimista y colorida en determinadas partes del disco (véase, “Say Something Loving” o «I Dare You»).
“I See You” empieza con algo totalmente diferente: “Dangerous» es un tema que deja claro de qué va el disco, muy electrónico y contundente a la vez que pegadizo. Después llega una de las canciones con más buen rollo del álbum, la ya conocida “Say Something Loving”, donde el color aparece por primera vez. Pero de golpe llega “Lips”, que recuerda más al álbum homónimo del grupo, con una Romy con una presencia casi angelical. “A Violent Noise” aparece de repente como uno de los temas más diferentes de todos, con una base bastante discotequera pero que se complementa y se ajusta a las voces sin problema. Seguidamente llega la perfecta “Performance”, una de esas canciones que mantienen el álbum en alza. “Replica” se sucede con mucha clase hasta que aparece “Brave For You”, uno de esos temas capaces de llegarte, una demostración de fuerza y sentimiento en toda regla, similar a la conocida «Angels», pero con más altibajos sentimentales. “On Hold”, primer single del disco, de sobras conocida por todos a estas alturas y seguramente el temazo del disco. Pero no se aleja mucho “I Dare You”, otro hit capaz de alegrar a cualquiera. Y para finalizar llega “Test Me”, otra pista lenta con piano a la antigua usanza The XX y que nos vuelve a dejar a todos con ganas de más.