Autumn Comets presenta en el Teatro Lara «Moriréis en Camboya».
Dentro del programa SON Estrella Galicia, después de la actuación melancólica e íntima de Neuman, y bajo la mano del sello Subterfuge Records aparecieron en el Teatro Lara Autumn Comets.
Para romper el hielo y acercar a un público acomodado en las butacas, (en mi opinión poco acertado elegir este tipo de salas/teatros), tocaron “This is for everything”, mostrando su primer tema del reciente álbum “Moriréis en Camboya” con sus ritmos pausados y sus cambios de registro.
Seguido de “Fuck Bird” llegó “Baltimore”, para mí uno de los mejores temas del álbum… y es que sus primeros treinta segundos de piano que van de menos a más, explotan con la entrada de la batería haciendo del tema un cresçendo digno de ser escuchado una y otra vez.
“Eslovaquia”, la famosa y aclamada “Snake at 3:00AM» y el tema de uno de sus anteriores álbumes “2:15” – La conocida cover de Bonnie Price Billy- dieron paso a un tema compuesto hace unos días para regalo de los allí asistentes y que tuvo su culmen en el final del tema cuando Julián “estrelló” la guitarra contra el suelo. Este nuevo tema, al igual que el álbum que estaban presentando, nos dejó muy buen sabor de boca.
Antes de los bises nos pusieron en bandeja otro temazo: “The Sea Won´t be Calm for Long”, y es que en sus más de cinco minutos de canción, incluido el cierre, tienen un sinvivir de detalles, toques rítmicos y sonidos que hay que agudizar el oído para poder disfrutar… algo se perdió en el directo entre «raros» sonidos y tanto movimiento en el escenario.
Los bises fueron perfectos para terminar con el aplauso del público. Tanto “When the Seagulls Follow a Trawer”, en la que los dos hermanos se fundieron en medio del escenario en un comprometido cruce de miradas y gestos, como “Plans” fueron perfectamente ejecutadas hasta que en el final de la canción se desató la locura en el escenario golpeando, ya por segunda vez, la guitarra contra el suelo como si a Julián le fuera la vida en ello. Punto y final a una velada con ciertos toques de folk, compases sintetizados, violines y suaves tonos de voz.
Autumn Comets salieron fríos y algo compungidos, algo que se podía ver en ciertas canciones y, aunque el concierto iba cogiendo más tono, es cierto que, (y a mí me gusta la formación), a la forma de actuar le faltó tacto para llevarse a su terreno al público. Creo que les faltan conciertos para desplegar todo el potencial que tienen y que explotan en pequeños momentos llevando al público en una campana de Gauss de arriba abajo pero sin eclosionar y pasearse con los ojos cerrados por encima de los espectadores.
Para mí, una buena presentación de “Moriréis en Camboya”, aunque todo es mejorable, donde se nota una gran evolución respecto a sus últimos trabajos y se aprecia un álbum muy bien producido. Seguramente con subirse un poco más a menudo por los escenarios, estos madrileños tardarán muy poco en hacerse tanto con el público en sus directos como con su propio “miedo escénico”. Se merecen un gran hueco en el panorama musical, si es que todavía la gente no lo tiene claro.