Maryland se rodeó de amigos para echar el cierre a «Get cold feet»
Hacía tiempo que Maryland no se dejaba ver por Madrid y volvió por todo lo alto eligiendo esta ciudad para su concierto oficial de fin de gira. El lugar que escogido para tal acontecimiento: la sala El Sol, uno de los templos del sonido de la capital pero, por más que me duela reconocerlo, esta vez no fue fiel a ese título… y es que los vigueses son una banda con un sonido potente, guitarras muy presentes, bajo y teclados marcando melodía, que se acompasa perfectamente por las voces empastadas de Rubén y Arturo, pero en esta ocasión la sala no les acompañó de la manera que nos tiene acostumbrados y a la salida de mesa le faltó un poco de «punch» para conseguir ese sonido.
La noche comenzó con los teloneros Under We Are calentando al público que poco a poco iba llenando la sala. Pero es difícil crear ambiente cuando se produce un parón entre la primera y segunda canción de más de tres minutos; todo por no contar con todas las guitarras sobre el escenario y tener que ir a buscarla a los camerinos subterráneos de la sala Sol. Fallo imperdonable que seguro sirve de escarmiento a esta joven banda cuando se vuelvan a encontrar ante una oportunidad como esta.
Este tirón de orejas nada tiene que ver con su música: rock en inglés con tintes garajeros, con un tono áspero que le da la voz de Iván, mezclado con el clásico britpop de los 90′.
Presentaron las seis canciones que componen su primer EP «Learning Needs» y se arrancaron con algún tema nuevo. Una carta de presentación que llamó la atención de más de uno que seguro se acercó al día siguiente a su web http://underweare.webs.com/ para bajarse de manera gratuita este primer trabajo.
Tras ellos llegaron los protagonistas de la noche: unos Maryland que traían las ganas y el saber hacer que siempre presentan en sus conciertos. Como ya he resaltado en otras ocasiones, la actitud de estos chicos sobre el escenario es pa quitarse el sombrero, dando siempre el 100% sin importar donde estén y haciendo sentir al público que esa noche no será una noche cualquiera. No se dejaron ningún tema de los que ya todos sus seguidores corean en cada concierto: «Red Boots«, «Atom Bomb«, «So Happy, So young» o la tremenda «Lost«. Recuperaron canciones que hacía tiempo no tocaban en los directos como «Revolution» y subieron al escenario a amigos de la talla de Santi Araújo (La Familia), Alex Penido a la batería, que dualizó de manera poderosa con Jaime (batería de Maryland) o Ángel Carmona («Hoy empieza todo» Radio3) y Martí Perarnau (Mucho) que subieron al escenario con sus respectivas guitarras para interpretar una brutal cover de «Rockin‘ in the Free World» de Neil Young cerrando así el concierto.
Mucha carretera, furgoneta, ciudades visitadas, horas sobre el escenario dejan ahora paso a esa sensación de fin de gira que seguro sentirán y que solo se supera cogiendo lápiz y papel para volver componer y tener una nueva excusa para salir de nuevo.
Fotos Inma Lorente (@littleforespan)
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