Entrevistamos al grupo barcelonés Mujeres quien está presentando en directo su último trabajo, ‘Un sentimiento importante’
Los componentes de Mujeres estarán tocando el próximo fin de semana en el Esmorga Fest y en la sala La Salvaje de Oviedo acompañados de Pingüino. Su batería, Arnau Sanz, responde a las preguntas de EL PERFIL DE LA TOSTADA.
Debutasteis en 2009 tocando en bares de Barcelona. Casi 10 años después, ¿qué queda de ese espíritu primigenio de Mujeres?
Casi los mismos componentes, las mismas ganas de tocar y de hacer buenas canciones y presentarlas sin parar.
Habéis actuado más allá de nuestras puertas como Reino Unido o Italia. ¿La sensación de jugar fuera de casa os aportó algo como banda? En cuanto al recibimiento, ¿se entiende vuestra música mejor aquí o allí?
Siempre que tocas, además de la ilusión que hace poder ir a un sitio que no conoces, aporta más experiencia, saber cómo funcionan las salas de otros países, la gente, etc.
El recibimiento pues depende de la ciudad, como aquí. En algunos lugares siempre encuentras gente que viene a verte y en otros cuesta un poco más, pero lo disfrutamos igual. Nuestras canciones, ya sean en inglés o en castellano, creo que funcionan en los dos lugares, aunque es verdad que al haber tocado tanto por aquí la gente te conoce más y se las sabe más.
‘Reyerta’ fue el videoclip que os sirvió de carta de presentación a través de la todopoderosa MTV. ¿Os sirvió su éxito para predicar la palabra del garage y del rock&roll por otros lares?
Jajaja, creo que no predicamos demasiado, pero cualquier tipo de promoción venga de donde venga sirve para que alguien más te conozca o para que los que te conozcan tengan algo más de información de ti, así que todo es bienvenido.
Tras aquellos inicios que os pusieron en escena, ¿hubo un bajón o conseguisteis manteneros a flote?
Siempre hemos tenido la misma idea: tocar sin parar. Así que durante todos estos años hemos mantenido un buen ritmo de conciertos sin pensar demasiado en la repercusión o en si había o no bajón; simplemente hemos seguido tocando y componiendo como siempre. Por suerte, la gente siempre nos ha apoyado y aceptado lo que hacemos.
¿El público español -y la industria- corresponde a vuestro amor por los ’60? ¿Es difícil encontrar cabida a un estilo musical como el vuestro para conseguir bolos o para mantener un público a lo largo del tiempo?
El público siempre ha respondido de forma positiva a nuestra música. En algunos lugares quizás ha costado un poco más que la gente viniera a vernos, pero la verdad es que en ningún caso nos podemos quejar: siempre hemos tenido facilidades para conseguir conciertos en diferentes ciudades.
En 2017 publicásteis el disco ‘Un sentimiento importante’. ¿Ha sido vuestra primera incursión en español? ¿A qué se debe el cambio de idioma con respecto a trabajos anteriores?
Bueno, desde la demo siempre hemos hecho algunos temas en castellano en todas nuestras ediciones. Incluso editamos el EP ‘Aquellos ojos’ cantado íntegramente en castellano. La decisión fue tomada por diferentes factores el año pasado, ya que, entre otras cosas, nuestro guitarrista solista dejó el grupo. Estuvimos en un momento de incertidumbre y decidimos intentar algo distinto para motivarnos y probar si podíamos hacerlo.
Habéis tocado en festivales del tamaño del Primavera Sound y en salas pequeñas. ¿Como grupo qué os resulta más sugerente? ¿La cercanía del público o la adrenalina de la multitud?
Supongo que para un grupo que demanda un feedback del público y que intenta que la gente salte y baile lo ideal son las salas pequeñas; pero también es verdad que en los festivales nos han tratado fenomenal e intentamos disfrutar en cualquier tipo de espacio. También tengo que decir que yo, al ser el batería y estar detrás de mis compañeros, normalmente no veo nada, así que podría estar tocando sin nadie delante y me lo tomaría de la misma forma.
¿Vender cassettes en vuestros directos es un ataque de nostalgia o una reivindicación a cómo sonaba la música para los que tenemos unos cuantos años?
Bueno, creo que ni una cosa ni otra, cintas de cassette las ha seguido habiendo siempre, en conciertos ya sea de punk, noise, ambient, etc. se sigue usando como algo habitual y nosotros simplemente hemos editado en un formato que usamos y consumimos.
¿Y tocar un estilo como el vuestro, alejado de modas pasajeras? ¿Es un acto de heroicidad o realmente habéis conseguido vivir de la música?
Cuando empezamos, quizás aquí no había grupos que hiciesen lo mismo que nosotros, pero sí que es verdad que en Estados Unidos era un estilo de moda y con gran respuesta de la gente; con los años hemos intentado pulir el sonido y mejorar componiendo sin aburrirnos. Por otro lado, la pregunta de vivir de la música no sabemos cómo responderla. Cualquier grupo debería tocar simplemente por el placer de tocar, no para vivir de eso. Si por alguna circunstancia se da, fenomenal, pero si no, creo que es un enfoque erróneo. Nosotros tenemos la suerte de hacer cosas además del grupo que nos apasionan y no enfocamos el grupo en cuestiones económicas.
Decía recientemente Iván Ferreiro durante un concierto que «la normativa mata al rock». ¿Estáis de acuerdo con eso? ¿Al rock genuino se lo ha cargado el buenismo de unos y la legalidad imperante de otros?
No creo que nadie tenga el poder para cargarse un estilo de música, tampoco creo que haya un rock genuino como, definitivamente, dudo que Iván Ferreiro haga rock.
La RAE define la música como «sucesión de sonidos modulados para recrear el oído». Dadnos una buena definición propia de música.
Wow, ¡pues me gusta esa definición! Pero ya que nos habéis pedido una definición, diría que la música es: una expresión artística realizada en solitario o compartida, que intenta despertar sentimientos en el receptor. Y me quedo tan ancho.
Si tuvierais que recomendar a un artista o grupo contemporáneo al vuestro, ¿con quién os quedaríais?
A bote pronto, Gabriel y Vencerás, Univers y Jazz.