Modelo de Respuesta Polar visitó por segunda vez Oviedo presentando su nuevo trabajo ‘Más movimientos’

Movimiento es una palabra con muchas acepciones. Para empezar, porque más allá de un acto físico que produce cambio, también puede aludir a aspectos más espirituales. Desde el propio efecto de mover algo de sitio a la «alteración, inquietud o conmoción» que define la RAE. Pero también el «alzamiento, rebelión», o la «primera manifestación de un afecto, pasión o sentimiento, como los celos, la risa, la ira, etc». El movimiento altera, produce variedad, desprende de toda rigidez aquello que toca. La música es movimiento a través del compás y puede ser tan etéreo como una palabra divergente que da estilo a una composición escrita.
‘Más movimientos’ ya evidencia que lo que ha dejado de ser de una manera es plural porque viene acompañado; quizá el disco de ‘Dos amigos’ (2016) era más pródigo en canciones bandera, intensas cual cuchillas rajando un lienzo recién terminado (véase ‘Momentos similares’ o la propia ‘Dos amigos’). El nuevo trabajo es una continuidad inevitable de dicho mecer, porque apenas les separa un año y el movimiento precisa de su tiempo para prender la mecha y declarar el incendio.

Modelo de Respuesta Polar en La Salvaje de Oviedo. / A. FERNÁNDEZ

Modelo de Respuesta Polar en La Salvaje de Oviedo. / A. FERNÁNDEZ


El pasado sábado en su concierto en la sala La Salvaje de Oviedo los valencianos abrieron con ‘Siempre’, canción que sirve de pista de aterrizaje a su último trabajo. Con un buen puñado de canciones nuevas en el bolsillo, Modelo de Respuesta Polar fue soltando lastre: ‘Empezar de cero’, ‘Revivir’ o ‘Sábados’ fueron algunas de las elegidas. ‘Mucho para ti’, ‘No me falles’, ‘Planes’ y ‘Más movimientos’ más intimista si cabe en acústico siguieron marcando el ritmo del concierto.
Sonaron en directo con claridad meridiana desde la primera nota; un sonido limpio a la altura de las expectativas y de sus letras. Mensajes en una botella que ganaron garra en vivo. Contenido intimista que se siguió evidenciando en ‘Cómo crees’, ‘Tu canción’, ‘Que no se apague’ además de ‘La guerra y las faltas’ (‘Así pasen cinco años’, 2012).
«Tenemos fama de que la gente está callada en nuestros conciertos», reconoció Borja Mompó, así que pidió romper el maleficio y apeló al público para que cantara con él al ritmo de ‘Miedo’ de su álbum ‘El cariño’ (2014).
Sin apenas estribillos, las canciones de Modelo de Respuesta Polar conformaron un viaje emocional con espacio para los bises: ‘Momentos similares’, ‘La juventud y el tiempo’ y ‘El cariño’. Canciones intensas, canciones linterna para noches de invierno con ganas de cantar y de mover sentimientos ahogados.