Mucho aprovechó el aniversario de la sala El Sol para dar por terminada su gira acompañados de un elenco de artistas y amigos
Crónica: Ana R. de Santiago
Fotos: Aby Caleidosférica
(Madrid – 22/01/2015) “Si te esperas no habrá manera” de que puedas resistirte a bailar hasta el último acorde de este grupo cósmico que el pasado jueves 22 nos hicieron ver las estrellas en (la sala) El Sol. Así empezaba una noche con los cuatro integrantes de Mucho, con «La Distancia» pero no precisamente con su público, con quienes mantuvieron una conversación constante entre canción y canción creando así una cercanía especial con el mismo.
Más tarde empezamos a comprobar que “salir de una pieza” de «La Base de la Montaña», iba a ser casi imposible con los ritmos de este grupo pop-rock que fue ganándose cada vez un poco más al público dado a que nos transmitían lo bien que se lo estaban pasando ellos en el escenario. Pero en su concierto de fin de gira no querían estar solos, así que tras esta canción llamaron al escenario a uno de los integrantes de Miss Caffeina, Álvaro Navarro, quien les acompañó aullando con su guitarra a lo largo de «El Lustroso Alarido». Y, al contrario de lo que dice la letra esta canción, estuvo más que bien. Pero pasaba el tiempo y «Corre Mi Reloj», así que saltamos sin mirar y creyendo en «Los hijos del Mal»
Mucho prometieron una noche cósmica y llena de ritmo y no decepcionaron. Además de sus canciones, añadieron a su setlist versiones como la que hicieron de «Level» de Raconteurs. Y si de nivel iba el asunto, nos alcanzaron «Las Plantas» con las que no pudimos repeler el ataque frontal de una de las canciones más lentas del grupo como es «Vas a Saturar». Pensábamos que tras esta balada íbamos a bajar la guardia, pero la banda no bajó el ritmo en ningún momento y es que tras esta canción llegó una de las fuertes de la noche: «Cómo si no Hubiera Mañana», la cual tocaron acompañados de Víctor Fisherman, integrante de Sonograma y de la banda de Ángel Stanich, quien le dio su particular energía a dicha canción.
Pero no todo iba a ser rock and roll, la banda nos tenía reservada una sorpresa techno como es la canción de «La Larga Risa del Emperador», con la que nos hicieron mover los pies al ritmo de sintetizadores como si de una fiesta de los 80 se tratase. Y por supuesto, el trato fue exquisito y el público fue «Más feliz sin Televisión» además, todavía quedaba mucho para que acabasen con nosotros y en ningún momento sentimos que estuviésemos en el «Sitio Incorrecto». A esta última canción se sumó el guitarrista de Iván Ferreiro, Emilio Saiz, sin el que, según el cantante de Mucho, Martí Perarnau, no habrían podido hacer la canción de «La Distancia». Poco a poco el concierto iba llegando a su fin, pero no sin antes despedirse con la canción «Grupo Revelación» en la que contaron con la colaboración de Emilio Saiz y el batería de The Right Ons, Ramiro Nieto. ¿De verdad piensan que ahí se acabó el concierto? Para nada.
Tras escuchar los coros que reclamaban un bis, aparecieron sobre el escenario Martí Perarnau y Charlie Bautista, componente de la banda de Jero Romero, anunciando “un nuevo hit de Mucho” que se trataba de una versión de la canción de Prince «Purple Rain». Pero todo lo bueno se acaba, y tras echar «La Sal de la Tierra» de la mano de Charlie Bautista y Víctor Fisherman, Mucho se despedían con «La Primera Luz del Día» junto con Emilio Saiz y Charlie Bautista.
A pesar de ser un concierto de fin de gira a Mucho todavía les queda por dar mucha más guerra, así que si quieren formar parte de un viaje cósmico no duden ni por un instante subirse al cohete de la música de esta banda.