Natalia Lafourcade, Carla Morrison, Lila Downs y Amandititita
Resulta llamativo el papel femenino en la nueva música latina que se está desarrollando actualmente. Presentar a cuatro de estas figuras que encabezan este fenómeno en México es el objetivo de este artículo.
Natalia Lafourcade
Formada bajo el método Macarsi creado por su madre, Natalia, música precoz lleva una infancia entre instrumentos que la han llevado a evolucionar hasta convertirse en una de las artistas más reconocidas de latinoamérica.
Después de pasar por varias bandas en México encuentra la fama mundial con su canción “En el 2000” de su primer disco homónimo ya en solitario, para volver a cantar en conjunto unida a La Forquetina lanzando “Casa” único LP salido de esta agrupación.
Antes de volver a su carrera en solitario colabora con varios proyectos como el unplugged de Julieta Venegas o colaboraciones con artistas de varios países y de estilos diversos sin llegar a colgarse ninguna etiqueta.
En 2009 publica «HU HU HU», un disco íntimo que profundiza en lo infantil y se convierte en un paso hacia su madurez personal y musical.
En su búsqueda por esa identidad se encuentra con las canciones de Agustín Lara, a quién rinde homenaje con su disco “Mujer Divina” recopilatorio a modo de duetos con artistas como Meme o León Larregui o Devendra Banhart.
Carla Morrison
Carla Morrison se embarca en la música en un inicio inestable hasta que descubre su propio estilo y su individualidad.
La sensibilidad forma parte esencial de esta artista, que es capaz de sacar la mayor fortaleza de esta supuesta debilidad y procesarla, para formar lo que hoy en día es una de las mayores promesas del nuevo sonido mexicano, un gran ejemplo de esta nueva identidad cosechada en la nueva generación de este país.
Todo esto se encuentra en los tres EPs de la cantante y en su LP “Dejenme Llorar”, donde el hilo conductor son sus propias emociones desnudas al público.
Unas canciones que cantan a un amor tan extenso como cambiante, que abarca desde el sabor más amargo de una soledad no dicha y una melancolía plenamente acomodada dentro de su ser, hasta una dulzura casi mágica que comparte con quien quiera escuchar las mieles del amor correspondido, el apoyo incondicional de la amistad y el resurgir de uno mismo.
Lila Downs
Hija de la cantante Anita Sánchez y el profesor de arte Allen Downs, Lila muestra un gran interés por el aspecto social de su tierra natal.
Estudia antropología en Minnesota y estos conocimientos los traslada a su vertiente musical donde sus letras hablan de causas políticas y sociales que tienen relevancia en su generación como son la inmigración, la búsqueda de identidad, las raíces culturales, todo ello reflejado desde una visión profundamente femenina que no permite que otros pongan palabras en su boca.
Su activismo se manifiesta en cada uno de sus trabajos musicales, que se componen en sus inicios de canciones en español y otras en inglés para fomentar el intercambio cultural y el acercamiento de otro público hacia la música más tradicional mexicana.
Cabe destacar entre sus discos “Árbol de la vida” , “Ojo de Culebra”, o su último trabajo “Pecados y Milagros”.
Actualmente trabaja junto a Niña Pastori y Soledad en un trío que unifica en la música a tres culturas hermanas en un disco llamado “Raíz”. Que ya os hemos contado en entradas anteriores.
Amandititita
La reina de la anarcocumbia es Amanda Escalante, hija de una leyenda del rock mexicano.
Superviviente desde la cuna, este referente artístico rompe con el esquema de lo que conocemos como músico, no toca ningún instrumento, sin embargo es la creadora de un estilo tan personal como innovador en el que mezcla letras populares con las que acercarse al público y representar estereotipos sociales, usando un estilo más de rap o hip hop, integrados en melodías de cumbia, lo que realmente lo hace cercano al gran público.
Después de su polémica lucha con su discográfica, una Amandititita libre se muestra al público como esa artista de performance en sus directos, de canciones populares, de energía y rebeldía imagen que mantiene hasta la actualidad.
Compagina su carrera musical, en este momento promocionando su último disco “Mala Fama” con su videocolumna en el periódico digital “Sin Embargo” donde vemos una cara más reposada de Amanda pero igual de sincera y directa que sus canciones.