Un pedazo de Galicia en la sala La Riviera
La noche del sábado prometía y no era para menos, ya que Ivan Ferreiro regresaba a Madrid tras su lleno absoluto a principios de su gira allá por el mes de octubre de 2013. El cantante quiso recompensar a todos aquellos que se quedaron con las ganas de verles en esa fecha con un concierto en el que la sala Riviera estuvo llena hasta la bandera. Los que no le vimos en aquella fecha y los que quisieron repetir disfrutaron de una velada inolvidable.
El cantante, acompañado de su banda, creó un setlist compuesto por canciones de ayer y hoy, la mejor combinación para un concierto de estas características. Queríamos oír lo nuevo del gallego pero también queríamos recordar todas aquellas canciones que hemos ido escuchando a lo largo de nuestras vidas como «Promesas que no valen nada», o las románticas «M» y «Espectáculo» que sonaron de una forma distinta gracias al único instrumento que el piano de Iván y su voz.
Uno de los momentos en los que el público más se entregó con el cantante fue, curiosamente, con una canción que no era ni suya. Iván mezcló uno de sus temas tocados al piano con las primeras notas de «Insurrección» de Manolo García. Las más de tres mil personas asistentes se dieron cuenta en el momento de que canción se trataba y comenzaron a cantar como si de una sola voz se tratara la canción mientras el propio Iván se dedicaba a tocar el piano.
Respecto a su último disco «Val Miñor-Madrid: historia y cronología del mundo«, también hubo momento para él con canciones como «Pájaro Azúl», que sonó al principio del espectáculo, o «Alien vs. Predator«, tema que se notó menos fuerte sin la voz de la angelical Julieta Venegas. Pero las canciones que más hicieron vibrar la sala madrileña fueron algunos como el final de «El Bosón de Higgs», «Cómo conocí a vuestra madre» o la más bailada y la más aclamada, «El dormilón» primer single del disco.
Iván prometió momentos inolvidables y muchas, muchísimas sorpresas. El gallego no defraudó y para esta noche idílica tuvo a dos invitados especiales que le acompañaron en varias de las canciones del setlist. La primera fue la aparición inesperada de Eva Amaral quien fue recibida con una fuerte ovación. Iván y la zaragozana cantaron a dúo una canción himno para toda una generación «Años 80».
La segunda sorpresa fue una más esperada y fue la subida al escenario de su gran amigo y paisano Xoel López quien, tras su aparición, provocó un aplauso atronador mezclado con gritos entre los allí asistentes. Todos sabíamos que juntos harían temblar el escenario cuando cantaran «Turnedo» uno de los mejores temas del recopilatorio «Confesiones de un artista de mierda» donde el propio Xoel canta junto a Iván. Lo que no sabíamos es que tocarían una canción más, una de Xoel, «Tierra«, una canción que habla de la tierra que les vió nacer a estos dos grandes de la música, Galicia.
Sublime. Con esta palabra se resume todo el concierto. Una noche en la que dos horas han sido suficiente para poder reír, bailar, recordar tiempos pasados y ponernos melancólicos y románticos gracias a la voz del genial Iván Ferreiro.
Texto y fotos: Elena Solís @elexachung