IZAL regresa a Zaragoza, esta vez colgando el cartel de Sold-Out
Zaragoza – 28/12/2013 – La Casa del LocoQuiero empezar con los tópicos. Sí, qué bien que Izal se puso en medio. Sí, por el calor que hacía y la gente que había parecía que hubiéramos vuelto a la plaza del trigo. Sí, Izal «lo petan». Desde luego la felicidad debe ser lo más parecido a un concierto de Izal.
Y tampoco se nos ocurría mejor manera de despedir el año, musical, que con un concierto. Un concierto de ellos, los que habían estado tres veces antes en Zaragoza y no había casi nadie. Los que han colgado el cartel de entradas agotadas por donde han pasado, llegando hasta tocar dos veces en la misma ciudad para que nadie se quedara sin verlos. Conseguir entrada estos últimos días era toda una hazaña. Incluso aún quedaba algún rezagado en la fila cruzando los dedos porque quedaran en taquilla. Pero no. Casi hora y media antes del concierto ya había gente haciendo fila (que incluso daba la vuelta a la calle). La casa del loco llena y gente, mucha gente, con ganas de disfrutar de su magia.
Aunque están presentando su nuevo disco “Agujeros de Gusano” también pudimos escuchar alguna del anterior trabajo «Magia y efectos especiales» como «Conclusión en Do para ukelele«, «A nuestros rincones«, «Tu continente» o «Prueba y error«.
Si no has estado en el Sonorama en el momentazo “Qué bien” posiblemente no entiendas porque les llevamos tan dentro en el corazoncico, obviamente no podía faltar en su set-list. Hubo un momento que hasta me pareció ver al bombero tirando agua.
Algo que se hace imposible al sonar «Ockham» o «Pánico práctico» es dejar de bailar. Aunque nuestros piececillos no dejaron de moverse en ninguna canción.
Todavía no sabemos cuál es su «Extraño regalo» pero lo que sabemos de primera mano es que el público estaba muy emocionado durante todo el concierto. Y no se dejaron ni una canción de corear bien fuerte.
No nos la cuelan y tras los tres epílogos se marchan momentáneamente para volver con “Magia y efectos especiales” y “La mujer de verde”, sin duda algunas de las culpables de las agujetas del día siguiente.
Ojalá sigan llenando salas, estando en todos los festivales y generando esos buenos (y malos) comentarios.