Zahara nos gana una noche más

13/04/2013 Sala RadioLab - Almería

Por fin llegó la noche para volver a disfrutar de Zahara con «la pareja tóxica» en la sala RadioLab pero esta vez en un formato más acogedor, en pleno acústico.

Con el sabor dulce de la gominola que nos daban a la entrada nos encontramos con las canciones de una pareja tóxica en un escenario cuyo atrezo y poca altura sorprendió a más de uno. De hecho, Zahara no paraba de bromear con el público sobre su propia estatura poniéndose más de una vez de puntillas y con frases como “en realidad hoy daba igual que me hubiera puesto debajo porque solo lo habrían visto 10 personas”.

Después de unas cuantas bromas y agradecimientos por nuestra presencia, abre el concierto con la misma canción de apertura que en su último disco “El universo”. Una explicación de la siguiente canción sobre una amiga, un barco, lluvia y marineros mojados para dar paso a “La mujer mayúscula y el mar”. Continúa el concierto con “General Sherman” y “Del invierno”, canciones que pusieron en el público los pelos de punta, siguiendo en modo susurro cada letra. El concierto se hacía cada vez más ameno con las bromas de Zahara sobre su disco de deprimidos: “Rollo bajona no perdona”. Y dio paso a “Pregúntale al polvo” dedicándosela a la chica que le pidió la canción.

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Para la intro de unas de las canciones más coreadas nos explica, entre risas, cómo ganar el final de una relación de amistad gracias a la creación de “Photofinish”. Sin olvidarnos de “En la habitación”, “Lucha de gigantes” y “Frágiles”, saltamos a la maravillosa historia de cómo una canción corta puede dar problemas: “Me dijeron que les pasara la canción entera, pero yo no quería ser repetitiva cómo los pesados de la radio”.

Nos ofreció una versión de “You´re the one that I want” y, con la especial textura de voz que pone en esa canción, nos vamos a unas de las canciones cargadas de más rabia “Camino a L.A”. Haciendo un pequeño descanso en el mismo escenario junto al público, nos da paso al broche final de la noche; pide la ayuda y los coros de los asistentes para “Mariposas” y, en su interpretación, hace sonreír a más de uno.

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Lo que es cierto es que Zahara sabe cómo ganarse al público y hacer de un concierto más que una simple sucesión de canciones donde, poco a poco, nos va sorprendiendo más y más. En uno de los momentos más especiales de la noche, decidió acercarse más a su público y cantar sin micro “Olor a mandarinas”.

Para finalizar unas de las noches más especiales que ha tenido la sala RadioLab hizo sonar “Con las ganas” y nos dejó a todos maravillados, con ganas de más, de volverla a ver.