Las radiografías de Pasajero muestran puro rock
Pasajero es una formación repleta de talento, con melodías potentes y directas que beben principalmente de las fuentes del rock. Pero si algo queda claro al escuchar por primera vez este “Radiografías” es que tiene un balance perfecto entre ese rock de pura cepa y el pop más elaborado. No es un comodín recurrente, es algo que aporta la experiencia de sus componentes: Daniel Arias (Nuevenoventaicinco) , Josechu Gómez (Nudo Zurdo y Gelo Nutopia), Eduardo Martín (Gizmo) y Eduardo R. Paynter (La casa del árbol).
La primera de estas doce radiografías es “El pozo y el péndulo”, «melocotonazo» en toda regla como diría Ángel Carmona. Un tema en el que destaca ese bajo fuzz de Daniel Arias dando toda la potencia a una canción que es adrenalina pura , con un estribillo donde la voz acompaña a la melodía “…esclavos de un mañana donde no se pone el sol…”
Tras este primer latigazo, el disco trascurre entre letras melancólicas donde las historias en primera persona son la tónica fundamental, hasta que llega “Borro mi nombre” sin duda una de las canciones que marcan en la primera escucha. Avisamos al oyente para que esté prevenido en el segundo 37» de canción… ahí lo dejamos… Pasajero sigue con su raíz fundamental, dejando el peso y el protagonismo al bajo y la voz. Este tema refleja perfectamente lo que comentábamos al principio de esta review: Pop&Rock en esencia.
Con este subidón adrenalínico llegamos a “Mañana”, un tranquilo alegato a lo difícil que se hace tomar decisiones en las relaciones personales. Pasamos al rock clásico de «La copia de otra copia”, un tema que seguro sorprenderá a más de uno.
Y se cierra el disco a lo grande con “Autoconversación”, un tema que tiene toda la pinta de ser el elegido para cerrar también los directos.
Pasajero ha hecho un gran disco, de eso no hay ninguna duda, y seguro que se verá potenciado en los directos.