Desde que el sol empezó a dar un respiro a los que se encontraban en la playa de Riazor, comenzaron a sonar las primeras notas de este último día del Noroeste Pop Rock
Dos bandas coruñesas como Wolrus y Escuchando Elefantes fueron las encargadas de ir atrayendo a la gente hacia la arena. Alrededor de las 22:20h subió al escenario el primer plato fuerte de la noche: Leiva, que, ataviado con su característico sombrero, le puso ganas desde el primer momento pero la gente no se subió a su tren hasta que llegaron los clásicos de su ex banda Pereza «Animales» o «Como lo tienes tú«, fueron las más coreadas y bailadas por el respetable, rematando con un guiño al «Ey Jude» de los Beatles.
Personalmente agradecí enormemente el homenaje al «Loser» de Beck que mezcló con su tema «Miedo«.
La noche a estas alturas parecía perfectamente encaminada, y más sabiendo que el siguiente era un gallego ilustre como Iván Ferreiro, que abrió, como ya es costumbre en los conciertos de esta gira «Confesiones de un artista de mierda«, con la mítica fanfarria de la 20th Century Fox homenaje a su amor por el cine. Pero ni dejando claro que como dijo: «Es un puto placer estar aquí«, ni llenando de emoción el escenario con «Extrema Pobreza» o recordando temas de su época en los Piratas como «Años 80» consiguió levantar a un público demasiado expectante ante los acontecimientos. Unicamente al aparecer Xoel sobre el escenario para cantar a dúo «Turnedo» o cuando cerró su concierto con «Mi Coco» pareció que la parroquia quería comulgar con los hermanos de Nigrán. A mi parecer, su concierto se mereció otra respuesta más cálida.
Y para terminar la velada llegó la esperada comparecencia de Xoel López, que volvía a su ciudad tras cuatro años, en esa ocasión como Deluxe y después de haber recorrido miles de kilómetros. En un escenario repleto de músicos y en el que colgaba un enorme telón de colores con su nombre, Xoel presentó ante sus vecinos su último trabajo «Atlántico«. Se le notaba totalmente entregado y responsabilizado ante la situación, pero quizás estas ganas fueron las que hicieron que un concierto que prometía mucho se convirtiese en una gran ola de ida y venida de sonidos a la que la gente quizás no llegó a subirse del todo.
Intercaló temas de este último disco con otros de su época con Deluxe que fueron los más coreados del público, pero estos adolecieron un poco de la fuerza de antaño con esta nueva formación. Reclamó la presencia de su gran amigo Félix Arias para interpretar juntos temas de su antiguo dúo, Lovely Luna, y con ello quedó demostrado lo empastadas que quedan sus voces y lo compenetrados que están.
Hubo tiempo para las colaboraciones de Pulpiño Viascón, Iván Ferreiro, Leiva y Follas Novas. Fue una autentica pena que se escucharan tan poco las voces de las chicas de Follas Novas porque seguro que daban un aire mágico a los temas de este disco.
En definitiva, una noche muy especial para Xoel en la que reunió cerca de 20.ooo personas, y en la que quiso transmitir a todos los allí presentes ese sentimiento. Si tuviéramos que poner un pero, haciéndonos eco de los comentarios del público, sería que el concierto se alargó demasiado para los que llevaban allí desde las siete de la tarde… pero es que cuando a uno le gusta tocar, como es el caso del gallego, las horas parecen minutos y los minutos segundos.
Crónica – Miguel Chimeno (@MrChorusman)
Fotografías – Inma Lorente (@littleforespan)