LA MÚSICA SE VISTE DE NEGRO
La evolución del ser humano ha estado íntimamente ligada a la cultura. Desde las pinturas rupestres y los sonidos que aquellos primeros homínidos realizaban con huesos hasta lo que hoy consideramos música, más allá de un estilo encorsetado. Incluso, aunque en ocasiones haya estado desligada de otras artes como la pintura o la literatura; la música ha sobrevivido porque ha habido compositores, músicos, melómanos, entendidos y escuchantes que cosecharon el buen gusto por este disciplina artística.
Hoy hablaré de lo que está ocurriendo en la ciudad de la Alhambra pero es sólo el pico del iceberg… Muchas otras están sufriendo este “acoso y derribo” por proponer programaciones de diversa índole para el disfrute, recordemos, de muchos otros.
Granada es la ciudad del estudiante, del turista y del granadino de toda la vida. Se han formados grupos tan importantes y míticos como Los Ángeles, Miguel Ríos, Enrique Morente, Lori Meyers, Eskorzo, Niños Mutantes, Carlos Cano…y así un largo etcétera de formaciones que nacen e intentan crecer con mucha ilusión.
Primero fue una ordenanza de convivencia ciudadana en la que la música y otras actividades artísticas se prohibían y tachaban de actos delictivos. Poco a poco se fue apagando la música callejera, aunque los violines y acordeones desafinados no se vieran afectados por esta medida. Y no había hecho más que empezar…
En menos de dos meses se gestó una “caza de garitos” tan importantes como el Planta Baja. El Secadero, Peatón, Playmovil o Sugarpop donde su mayor delito había sido el apostar por la cultura. Decibelios por arriba, licencias por abajo, aforos no numerados…estas y otras excusas han llevado a multas y precintaje de equipos, y yendo más allá la pena de cárcel en el caso del dueño de El Secadero.
Y así surge la plataforma de GRANADAOFF. Como un movimiento humano al que le une la importancia de la música como cultura y no como un delito, ese es el lema de hecho. Hace ya un año del macroconcierto donde bandas granadinas aunaron sus acordes y voces a un mismo son. Más tarde y contrarrestando la protesta, nace GRANADA ON: Del Bolo al Cole donde bandas como Niños Mutantes enseñan el proceso musical de una manera didáctica.
Pero todos los esfuerzos por llegar a un diálogo con las instituciones no dieron sus frutos y así emerge la PROCIFESTACIÓN (el resultado de mezclar manifestación y procesión) Un llamamiento a una marcha pacífica y fúnebre por la situación actual de la música en Granada. Los únicos requisitos eran ir vestidos de riguroso negro portando las fundas de los instrumentos vacías.
Así en la tarde de ayer, martes 25 de mayo a las 20:30h salió un pequeño palio del siglo XXI entrando en la carrera oficial de la Gran Vía. Custodiado y empujado por amigos del sector musical y representantes de Granada Off, llevaba en su estandarte la batería lúgubre que marcaba el pulso de los penitentes. Tras ellos caminaban al paso del dolor un grupo numeroso batukados que ensordecían los oídos de los asistentes.
La primera parada se realiza ante la Delegación del Gobierno. Vuelve a sonar la batería con un ritmo doloroso, la procifestación se vuelve a poner en marcha.
La procifestación dobla por Reyes Católicos y continuamos con la marcha solemne que dibujan con sus pasos de la manta negra de penitentes que se expandía tras el palio. La parada obligada a las puertas del Ayuntamiento, ¿habrán oído esa percusión dolorosa? Se alzaban fundas de guitarras con las iniciales RIP.
Divisamos Puerta Real y sabemos que el recorrido está por finalizar. Giramos por la calle Ángel Ganivet y llegamos al encuentro: la Plaza Mariana Pineda.
Allí el cantante de los Niños Mutantes Juan Alberto leyó el manifiesto saetero. Los aplausos a cada verdad más emotiva, todas las esperanzas se alzaban al cielo en la noche de ayer y es que Granada no andaba sola… Más de dos mil personas secundaron esta Procifestación.
Nadie se quiso perder la cita. Desde Jota de los Planetas, los Lori al completo, Niños Mutantes y familia, Pepegu y su banda Eskorzo, camareros, técnicos de sonido y luces, pipas, músicos de conservatorio, músicos de la calle, melómanos, etc. Porque la música no se hace sola sin todos estos sectores adyacentes. Encerrarnos en pentagramas sin notas y letras…seguiremos luchando por algo que es nuestro: LA MÚSICA.
Crónica y fotos Lorena García (@Lorena_vla)
para El Perfil de la Tostada