2012-04-22 – Madrid
Lugar: sala Siroco.
Entrevistados: Laura Rubio (cantante), Óscar Rama (guitarrista).
-Es sábado 28 de abril, estrenáis Directo desde la Joy, grabado a finales de 2011 en la mítica sala madrileña Joy Eslava con un lleno espectacular… Y lo celebráis con otro concierto en otra mítica sala dela capital como es la sala Siroco. ¿Por qué habéis decidido celebrarlo así en vez de como habría hecho otra gente, dando una rueda de prensa, haciendo un poco de promoción con la discográfica y a casa?
[Laura] Nosotros no sabemos hacer esas cosas, nosotros somos de tocar… Entonces, cuando tenemos que saludar, o comentar algo, o decirles algo a nuestros fans o a quien nos escuche, pues lo hacemos tocando. Y la verdad es que teníamos ganas de venir a Siroco, teníamos ganas de volver a esto, que es casi nuestra casa… Llevamos tocando aquí desde que nacimos como banda, y después de la reforma de la sala nos apetecía volver a casa.
[Óscar] Hombre, tocar en la Siroco es tocar en casa… Aquí empezamos, yo he estado cinco años trabajando de técnico de sonido… Es una sala que ha hecho mucho por nosotros, nos ha tratado muy bien (tenemos barra libre, que ayuda) y es una sala emblemática a la que queremos mucho. Podríamos haberlo hecho en Sol o en una sala con más aforo, porque hoy se va a quedar gente en la puerta, pero la Siroco es la Siroco, y nos encanta. Lo hacemos porque queremos.
-Con Traje Nuevo empezasteis a llegar al público de manera más generalizada, aunque llevabais tocando juntos casi ya diez años. ¿Cómo se siente la diferencia entre estar tocando en salas de 80 ó 100 personas a empezar a hacerlo en teatros y salas de conciertos de 750 ó 1.000 personas?
[L] Realmente es lo que tú dices, es que el trabajo al final notas que da sus frutos, después de tanto tiempo tocando juntos es realmente gratificante de repente llenar la sala Caracol, por ejemplo… Sin tenerlas todas contigo, acabas viendo que sí, que al final eso sale para adelante. Y eso es realmente bonito.
-Sobre todo teniendo en cuenta que seguís fieles a vuestro estilo.
[L] Sí. Aunque con los años aprendes a pasar un poco de todo, y con tu música haces lo que tú quieres cuando tú quieres, no hemos cambiado en nuestra esencia. Seguimos siendo una banda de rock y sustancialmente mantenemos nuestro estilo en directo. Con más años y más cascaos, pero seguimos igual. Y sí, cuando empiezas a ver que vendes algún disco más y cuando de repente llenas una sala del triple de aforo que el año pasado…
Pues sí que te hace ilusión. Aunque cuando empiezas a dedicarte a esto de manera un poco más ‘industrial’ por así decirlo, sí que te llevas las desilusiones y los sustos que significan las cifras, los reparto. Y luego cuando llega el momento de coger la furgoneta y salir a rodar, lo que quieres es dar los bolos que puedas… ¡Aunque en ocasiones tengas que pagar para salir a trabajar! ¡Somos los autónomos peor pagados del mundo! Pero todo eso es parte del rollo sentimental que implica ser artista, ¿no? Está dentro del romanticismo y el ‘dulce veneno’ que es la música.
-Pues hilando con esto, ¿veis que la venta física de discos tenga futuro? ¿Cómo veis la salud de la industria discográfica (que no la musical)?
[Óscar] Yo creo que sí, pero hay que cambiar las formas… Creo que siguen enquistados en el pasado, y lo tienen complicado. Yo no soy de los que piensan que la industria va a acabar con la música ni mucho menos, el suyo es un negocio igual que el nuestro. Lo que no puedo hacer es pensar en cómo les va a ellos, cuando yo no tengo resuelto lo mío. Ellos tendrán que tirar para adelante como puedan, y nosotros intentaremos lo mismo.
[Laura] Hombre, yo es que soy muy vintage y muy ‘analógica’, y me gusta pelar los discos… Y en esos términos es muy complicado seguir adelante hoy en día. Pero no creo que la tecnología sea la culpable del mal estado del negocio discográfico. La tecnología nos ha ayudado mucho a los artistas, hay plataformas tecnológicas con las que de una manera u otra acabas haciendo lo que quieres hacer que no es otra cosa que darte a conocer y llegar a la gente.
-Sí, bueno, están Youtube, Spotify, etc.
[L] Sí, sí, todo el rollo de las redes sociales y demás… El myspace en su momento –aunque ahora esté de capa caída- fue una herramienta esencial para muchos grupos, y ahora hay otras similares. Y eso nos hace un súper favor a los músicos. Además a día de hoy se está haciendo posible ese milagro que es la autoproducción. Gente que con dos ordenadores y cuatro micrófonos en su casa se sacan un disco increíble, y lo dan a conocer a más gente ellos desde su ordenador de la que una discográfica modesta podría haber soñado hace una década. Cada vez hay más música. Y la industria discográfica pencó en el momento en el que no se adaptó al cambio tecnológico, principalmente a internet.
Ya hace una década decían que estaban hundidos, pero ahí siguen. Ellos van a seguir ahí, van a aguantar, van a reeditar, etc, y al fin y al cabo las bandas necesitan un soporte económico que las discográficas pueden seguir proporcionando. Pero el salto absoluto a lo digital –como ya han dado en muchos otros países- tendrá que producirse tarde o temprano. Nosotros tenemos una gran suerte con BMG, con la que hemos encontrado una fórmula de colaboración mutua, pero que ya no se limita a una discográfica al uso, es una colaboración mucho más amplia. Y hay que avanzar en esa dirección. Como decía Belén Arjona, “O te mueves o caducas”.
-En una época en la que las mesas de DJ sustituyen a las guitarras y los amplificadores en cada vez más escenarios, ¿cómo veis el futuro del rock?
[L] Hombre, a ver… Yo tengo muy claro que tenía que haber nacido en Tennesse hace muchos años y tener una mecedora en el porche, si me explico bien. Yo y en general Garaje Jack tenemos esa cruz y esa bendición de haber nacido con el veneno del rock en las venas. Y realmente el rock and roll es algo que nunca ha estado de moda y nunca lo va a estar, es parte del sentimiento rockero. Siempre va a haber bandas, siempre va a haber gente… ¡El rock es actitud!
-¿Y la actitud rockera tiene futuro?
[L] No. Pero siempre va a haber alguien que tenga un hermano mayor que les deje un disco o les ponga un video de unos que se llamaban Garaje Jack aunque lleven veinte años retirados, y diga ‘joder, pues molan sus canciones, voy a hacer una versión’, y otro día diga ‘pues voy a mezclarla con una de los Buenas Noches Rose’, y así como ha pasado toda la vida. Y es que el legado nunca está de más, siempre hay que dejarlo y transmitirlo. Y aunque no tenga futuro y el rock siga sin estar de moda por los siglos de los siglos, hay que seguir en ello. Seguir luchando.
-A ver, una pregunta puñetera… ¿Una canción vuestra con la que os quedéis? ¿Y una canción ajena?
[Ó] Nuestra me quedo con ‘Tú dirás’, del segundo disco… Me parece una de nuestras mejores canciones y me encanta tocarla. ¿Y una canción ajena? Uf, muchísimas, pero si tuviera que seleccionar una en concreto, ‘New York, New York’, de Sinatra, me parece sublime.
{¿De verdad? ¿Una canción tan poco rockera? Es fantástica, pero ¿es tu favorita?} Sí, completamente. Esta pregunta me la han hecho varias veces y siempre sorprende mi respuesta, pero es cierto. Es que es una canción perfecta, la estructura es magistral, los cambios de acordes, el ritmo, las cadencias, la armonía… Es simplemente perfecta.
[L] Buf, menuda preguntita, sí que es puñetera, sí (risas). A ver, ¿nuestra? Creo que me quedo con ‘Sabor a sal’, no por la canción en sí que es preciosa ni por la historia que cuenta, sino por lo que significó en su momento para Garaje Jack. Significa la reunión, el volver a estar juntos. Para mí significa mucho por eso. Y de otra gente… Bueno, dentro de la enorme devoción que tengo por la música, también tengo una especial debilidad por los Black Crowes, y joder, podría quedarme con todas, con todas. Es muy difícil. Podría decirte que me quedo con ‘Remedy’, pero por ejemplo últimamente estoy flipada con ‘Soul Singing’ porque me da un optimismo y un buen rollo increíbles. Por nombrar una segunda banda te diría Pearl Jam, me encantan desde siempre, y tantos años después siguen sacando discos que me parecen increíbles.
-Y para terminar… Me estáis viendo con mi camiseta de Led Zeppelin, y no es ningún secreto que os encantan. ¿Qué influencias tenéis?
[Ó] Hombre, los Zeppelin sobre todo. Yo cuando era pequeño, en mi casa la batalla Stones contra Beatles no existía. Mi padre era de los Stones, y los Beatles no se escuchaban, estaban vetados. {¿¿Sí, en serio?? ¡Qué duro! ¿Esto es verídico?} Sí, sí, los Beatles eran los maricas, en mi casa sólo se escuchaba a los Rolling y a Zeppelin. Entonces, cuando me fui de casa, me desquité y escuché a los Beatles (risas). Siempre a contracorriente, ya sabes.
Garaje Jack acaban de publicar su Directo desde la Joy y tienen varios conciertos programados para esta primavera-verano.
Toda su información la puedes encontrar en www.garajejack.com y sus perfiles de redes sociales: www.twitter.com/#!/garajejack y www.facebook.com/jackgaraje.
© Sergio Santos para El Perfil de la Tostada.